Los castillos en la construcción son estructuras verticales de acero de gran relevancia en una obra, porque aportan rigidez a los muros de los edificios y los mantienen en pie. Por consiguiente, es importante saber qué son y cómo se construyen correctamente. ¡Continúa leyendo y conoce toda la información que preparamos para ti!
¿Qué es un castillo y para qué sirve?
Los castillos en la construcción son barras verticales de concreto cuya estructura interna está compuesta por elementos de acero corrugado, el cual se distingue por su gran resistencia y tenacidad, razón por la cual brindan sostén y estabilidad a los muros de las edificaciones. Por ello, también se les conoce como castillos estructurales.
Asimismo, los castillos sirven para reforzar los muros y las columnas de construcción. De este modo, tienen la función de aportar rigidez a las paredes y de distribuir hacia la losa de cimentación los esfuerzos que provienen del techo, de las dalas, o de los pisos de niveles superiores.
Por otro lado, es importante hacer una distinción entre los castillos y las columnas, pues mientras que las primeras tienen como principal función soportar las cargas de toda la construcción, los castillos equilibran las fuerzas en los muros y, a su vez, evitan que se fracturen. Así pues, los castillos suelen ser más delgados que las columnas.
Ahora que ya sabes qué son los castillos en la construcción y para qué sirven, te vamos a decir cómo están conformados y cuáles son sus tipos. ¡Sigue leyendo!
Tipos de castillos en la construcción
La estructura metálica de los castillos de una construcción está conformada por varillas corrugadas, alambrones y alambre recocido. Esto es importante, porque los dos tipos de castillos construcción tienen estos elementos, aunque de manera diferente. Por ello, a continuación te diremos cuáles son:
Castillos prefabricados
A estos elementos también se los conoce como castillos electrosoldados y se distinguen porque están conformados por varillas corrugadas de grado 60 y estribos de acero, que ya están unidos mediante un proceso de soldadura eléctrica. Debido a las características del material con el que están hechos, son sumamente resistentes.
Por otra parte, este tipo de castillos ofrecen varias ventajas, ya que son fáciles de manejar, de transportar y, sobre todo, favorecen el ahorro de tiempo, de recursos (mano de obra y materiales) y de desperdicios. De esta forma, los castillos prefabricados suelen usarse en la construcción de talleres, oficinas, bodegas y bardas en general.
Castillos ahogados
Este tipo de castillos estructurales se caracterizan porque se construyen con menor volumen de concreto, por ello suelen ir adentro de los blocks de hormigón. De esta forma, para cubrir los espacios se utilizan cuatro varillas, las cuales se distribuyen en los huecos y se unen empleando estribos de alambrón a lo largo de cada hilera.
Asimismo, la función de los castillos ahogados es aumentar la capacidad horizontal de los muros, para evitar que se vengan abajo. Por consiguiente, estos elementos se construyen durante la obra, empleando diferentes grosores y grados de varilla corrugada, según el requerimiento de la construcción.
¿Dónde se colocan los castillos en una construcción?
Los castillos en construcción se colocan en diferentes lugares de la obra, generalmente en los extremos, las esquinas y en donde se cruzan los muros. Aunado a esto, cuando las bardas son muy largas, los castillos se sitúan cada 3 o 4 metros de distancia, ello para darles más soporte y estabilidad estructural.
Por otro lado, también se ponen a un lado de los vanos o espacios que hay entre los apoyos de elementos estructurales como techos o ventanas. Además, dado que distribuyen los pesos, suelen estar unidos de manera perpendicular a las dalas y a la losa de cimentación.
¿Cuáles son las dimensiones de un castillo?
Las dimensiones de los castillos en la construcción dependen del tipo y tamaño de la obra, pues están sujetos al peso que va a soportar la estructura. No obstante, la altura promedio de una casa es de 2.5 metros y el castillo debe tener una media aproximada de 50 centímetros por arriba del muro, para que se pueda unir a otros elementos.
Con base en lo anterior, los castillos generalmente se componen por varillas grado 60 del número 3, cuyo diámetro o calibre es de ⅜ pulgadas. Cada varilla mide 12 metros de largo y, según las dimensiones de la construcción, se pueden adquirir por piezas o por tonelada. En este sentido, 1 tonelada de varillas de ⅜, tiene 150 varillas.
¿Cómo se construye un castillo?
Ahora te diremos cómo puedes construir correctamente un castillo en una obra. Pero, antes de continuar, no olvides que este procedimiento debe ser evaluado o supervisado por un profesional, ya que de lo contrario tu muro se puede caer. Asimismo, en la siguiente lista te mostraremos las herramientas y materiales que requerirás:
Herramientas
- Cizallas para cortar varillas
- Arco para segueta para acero
- Grifa de dos bocas o tubo para doblar acero
- Gancho amarrador de varilla
- Martillo
- Madera para encofrado o cimbra
- Un trozo de madera
- Gis
Materiales
- Varillas corrugadas de 3/8″
- Alambrón
- Alambre recocido
- Cemento
- Arena
- Grava
Antes de construir un castillo de concreto, debes tener en cuenta que, como hemos dicho con anterioridad, se colocan en todas las esquinas e intersecciones de las bardas y van anclados a la estructura de la losa, por lo que se trabajan desde la cimentación. Así pues, sigue estos pasos para hacer correctamente un castillo:
1. Estribos de alambrón:
Para hacer los estribos hay que cortar 70 centímetros de alambrón de ¼ de pulgada con las cizallas. Hecho esto, apóyate de un trozo de madera a la cual le vas a poner 4 clavos distribuidos en cuatro esquinas, estos servirán como palanca para poder doblar el alambrón.
Posteriormente, usa un gis para marcar en el alambrón los 15 centímetros que va a tener el estribo. Tomando estas marcas como referencia, coloca el alambrón entre los clavos y apoyándote de la grifa o el tubo realiza un doblez a un ángulo de 90 grados. Repite esta operación hasta que tengas los estribos que requieras.
2. Armado de castillo:
Coloca los estribos a lo largo de las cuatro varillas de ⅜ a una distancia de 20 centímetros entre cada uno. Recuerda que deben rodearlas de manera perpendicular. Por otro lado, corta varios tramos de 30 centímetros de alambre recocido, el cual servirá para realizar el amarre.
Para amarrar los estribos y las varillas, primero vas a doblar a la mitad el alambre y luego lo utilizarás para envolverlos en el punto en donde se unen. Hecho esto, con la ayuda del gancho amarrador procede a girar los extremos de los alambres de manera que quede trenzada y asegurada la unión.
3. Encofrado:
Para colocar un castillo entre dos bardas, primero realiza un corte dentado en los blocks de concreto que se encuentran en los extremos, ello garantizará una mejor adherencia entre el castillo y muro.
Por otra parte, para hacer el encofrado utiliza tablas de madera, las cuales las vas a colocar de manera vertical alienadas con el ancho del muro en ambas caras del mismo.
Asimismo, perfora las juntas del muro para que, a través de estos orificios, pases el alambre recocido con el que vas a asegurar el encofrado; de igual manera que en paso anterior, apoyándote con el gancho amarrador.
Toma en cuenta que las varillas deben quedar por arriba del muro por lo menos 50 centímetros; además, el armado de castillo debe quedar al centro del encofrado para evitar filtraciones.
4. Mezcla:
Es importante resaltar que, el tipo de concreto está sujeto a las especificaciones de tu construcción. Para hacer el concreto mezcla muy bien la arena con el cemento y el agua necesaria; después le arrojas la grava y vuelves a revolver la mistura hasta que adquiera la consistencia que requiere la construcción.
5. Vaciado:
Es importante que antes de verter el concreto en el castillo, primero debes humedecer la parte interna del encofrado para evitar que el concreto seque antes. Hecho esto, con ayuda de una escalera o un andamio, vierte el concreto desde la parte superior.
Asimismo, apóyate de una varilla para asegurarte de que la mezcla de concreto llegue al piso y, de esta forma, quede firme el castillo. Finalmente, espera el tiempo adecuado para que fragüe y cuando esto suceda, retira las tablas.
¿Ya conocías los castillos en la construcción? Si te ha sido de ayuda la información que te preparamos para ti, no dejes de comentarnos y de seguirnos en nuestras redes sociales. Además, recuerda que en el blog de Aceros Torices, podrás encontrar muchas más información sobre el uso de los distintos materiales para la construcción.
Asimismo, en Aceros Torices tenemos para ti los productos de acero corrugado de la más alta calidad, que en este artículo te mencionamos. Solicita tu cotización totalmente gratuita y comunicarte al número 55 5888 2185 o mandando un mensaje de Whatsapp a través del chat de nuestra página web. Nuestras ejecutivas de venta con gusto te atenderán.